A tres meses del asesinato del compañero y amigo Carlos Alberto Pedraza Salcedo
El 20 de Enero del 2015, un joven revolucionario era asesinado y rematado por un tiro de gracia en su cabeza. Su cuerpo quedó tendido en un paraje en el municipio de Gachancipá, como una amenaza manifiesta de crueldad que les esperaría a quienes anhelaban una Colombia nueva, libre y soberana.
La guerra sucia y el terrorismo de estado, hicieron que Carlos Alberto Pedraza Salcedo se sumara así a la interminable lista de jóvenes de nuestro pueblo que se enfrentaron sin miedo a una dictadura y sus esbirros, y que dio lo más valioso, su vida, para que la justicia social no solo fuera una frase, si no la lucha continua del pueblo y de sus gentes más humildes por las transformaciones sociales.
Como muchos otros jóvenes, Carne como le decíamos algunos, representa a una generación que vive y cree en la necesidad y la posibilidad de hacer la revolución. Vivía en Molinos al Sur oriente de esta capital tan grande y desigual, pero pudo vivir en Potosí, la Victoria, la estrella, el Policarpa, las Cruces, la Estancia, en Si loe, Florida blanca o la Comuna 13, y en muchos lugares más de nuestro país donde existen mujeres y hombres febriles a luchar y enfrentarse de cara a cara contra el enemigo.
Hoy es difícil sentirse joven, alegre, vivir tranquilo… En realidad no se puede, por el contrario, la juventud de hoy ha sufrido mucho y necesariamente la solución definitiva pasará por un camino largo, duro, con muchas penas y derrotas, pero con seguridad, con el calor y la luz de la victoria…Era parte del pueblo que se había puesto de pie. Pero era parte de un pueblo consciente, sin temor, que se enfrentaba diariamente a la muerte.
A tres meses de su asesinato no debemos olvidar de que era revolucionario. En el sentido que él reflejo con una vida dedicada al deber, decimos: no nos detendremos, nos levantaremos con dignidad y avanzaremos con más fuerza. Nos multiplicaremos en los barrios y veredas. Su nombre no se desvanecerá, de su vida renacerá en una nueva generación que no sabrá de derrotas, que no sabrá de lamentos, sino de luchas y victorias. Los revolucionarios seguirán trabajando, organizando, luchando y venciendo, pues todos los días somos pueblo y somos Carne también.
"Voy a recoger las cosas, que un dia quisieron que dejara atrás. Aquellos que me dijeron, que cantarle al pueblo era criminal. Voy a recoger mis sueños, mi vieja guitarra, mi forma de amar la esperanza de mi gente, que pese al destierro, no deja de andar. Aquella calle del barrio, los bueno amigos de la libertad, los que confiaron que nunca la vos de un cantor se podia apagar. Y aqui estoy, nunca me fui de allí, y aqui estoy, soy y seré el que fui. mi cancion, dira lo que vivi, sueño un nuevo amanecer, en mi pais.Acomodé los abrazos, las notas de aliento, la vitalidad, que hicieron que mantuviera los ojos abiertos, a la realidad. Reventaré los silencios, los miedos, los ruegos, la cruel soledad, recogeré la esperanza de un pueblo que clama justicia social.Mientras existan mas niños sin techo, con frio, peleando su pan, y se desprecie la vida, la vos de un cantor, no se puede apagar." Un Nuevo amancer- Grupo musical pasajeros.
Un amigo y compañero de Carlos Pedraza