los "gasolinazos" y el alza del dólar: un ajuste más contra los trabajadores
En las últimas administraciones PEMEX ha sido debilitada y desmantelada, además de los miles de despidos, para permitir que la iniciativa privada trasnacional y nacional se quede con la renta petrolera que generaba el 40% del PIB del país
Los maestros y normalistas de la Agrupación Magisterial Nuestra Clase repudiamos las medidas que toma el gobierno federal contra la economía de las familias trabajadoras con el reciente incremento del precio del combustible. Se avecinan -como lo han manifestado distintos medios- aumentos en transporte y alimentos, que los bolsillos de las familias trabajadoras no pueden sostener con un risible aumento al salario mínimo que está muy por detrás de los aumentos en los precios de bienes y servicios.
Durante el mes de diciembre cobró fuerza el anuncio del incremento al precio de combustibles, además del avance de la privatización en el sector de distribución de gasolina. Durante los últimos días del año y hasta hoy, el incremento en gasolina del 20% nos ha sacado a las calles nuevamente, como en 2013 y el año pasado a los maestros y padres de familia contra la privatización de la educación.
Privatizar una de las industrias estratégicas de la economía nacional tan importante como el petróleo implica el recorte a los servicios públicos, como la educación la salud, la vivienda, etc. En las últimas administraciones PEMEX ha sido debilitada y desmantelada, además de los miles de despidos, para permitir que la iniciativa privada trasnacional y nacional se quede con la renta petrolera que generaba el 40% del PIB del país.
En estos momentos, tenemos que aprender de las luchas del pasado, por ejemplo, de las luchas de los y las maestras en 2013 y 2016, donde para derribar la reforma a los maestros nos hizo falta la unidad con otros sectores organizados del movimiento obrero que junto a nosotros convocaran al Paro Nacional, dejándonos en mejores condiciones para derribar las demás Reformas Estructurales, ponemos esta lección al servicio de la lucha contra los gasolinazos: Llamar a los trabajadores de base y convocar junto a las centrales sindicales que se reclaman opositoras al Paro Nacional y exigir la renacionalización del petróleo y la abrogación de las reformas estructurales,
Las maestras y maestros que estuvimos al frente de la lucha contra la reforma educativa tenemos que volver a salir a las calles en defensa del derecho a una vida digna y a exigir un aumento de emergencia al salario ante la contundente inflación que se espera para este año, que alcance para cubrir la canasta básica alimentaria y los servicios básicos que las familias trabajadoras necesitan para vivir de manera digna. El año ha comenzado con movilizaciones y es necesario que los trabajadores nos pongamos al frente de esta lucha por defender nuestros derechos, en unidad también con el sector estudiantil, el campesinado y el movimiento de mujeres, quienes como trabajadoras y amas de casa ven mucho más de cerca como el salario cae en su capacidad de cubrir necesidades día con día.
Para poder parar los ataques del gobierno será necesaria la movilización y la organización independiente de los partidos patronales, hoy más que nunca se hace necesaria la participación activa de todos los sectores de trabajadores para defender los intereses de nuestra clase que son atacados con las medidas tomadas.
Por la unidad internacionalista y antiimperialista
No solo las políticas económicas de EPN, sino las de Trump, también atentan contra la vida de la clase trabajadora del país. Por ejemplo con el reciente anuncio de la cancelación del traslado de una planta de Ford ha disparado el precio del dólar nuevamente, incrementando la especulación y la inflación, esta es una de las políticas de campaña del magnate que intenta mantener la industria en sus lugar natal, con el fin no sólo de incrementar las ganancias de los grandes empresarios de EUA, y en total detrimento de la calidad de vida de los trabajadores al norte de la frontera, sumado a una mayor subordinación política y económica de países como México, para garantizar sus ganancias.
Esto, que ha provocado un alza de precios es un ataque directo a los intereses del pueblo trabajador, que junto a las Reformas Estructurales, ha cercenado desde los derechos laborales, y hoy busca atentar contra la nacionalización del petróleo con la Reforma Energética, además de encabezar el ataque contra la educación pública con la mal llamada Reforma Educativa, que cercena derechos laborales y abre el camino a la privatización de la educación.
Es necesario, abrir el camino de la movilización del pueblo pobre y trabajador en ambos lados de la frontera, teniendo acciones coordinadas entre los trabadores de EEUU y México, luchando contra la xenofobia trumpista, su imperialismo y la subordinación política y económica de EPN, que sólo beneficia a los grandes terratenientes, empresarios y accionistas y nunca a los trabajadores de ambos países.
Hagamos pues un llamado de unidad, diciendo bien fuerte y claro que la crisis económica, no la vamos a pagar nosotros, que la paguen los patrones, que fueron quienes la provocaron.
Hacemos un llamado enérgico a que este 20 de enero, día en que Trump asume la presidencia, nos movilicemos del anti-monumento de los 43 a la Embajada Yanqui a las 4 pm, para decir bien fuerte, que ni sus gasolinazos ni sus políticas xenófobas y de subordinación pasarán.