Vendedores ambulantes le dicen NO a Peñalosa y al nuevo código de policía
Cientos de ciudadanos que se ganan la vida en las calles se manifestaron el día lunes en el centro de la ciudad, pasando por la carrera séptima, el palacio de justicia y finalmente se reunieron en la plaza de Bolívar. Su mensaje fue claro, desean revocar a Peñalosa debido a que los ha expulsado de su sitio de trabajo incluso desde antes de que saliera a la luz el nuevo código policial, esto se puede ver por ejemplo en la calle 72, de donde expulsó a una considerable cantidad el año pasado, y sus programas de reubicación no han funcionado con la mayoría de los vendedores. No es un tema nuevo esto de que el mandatario bogotano quiera “recuperar el espacio público” adaptando medidas injustas e inhumanas, pues en 1998 desplegó un operativo policial similar para desalojar a los vendedores de la carrera décima, a quienes posteriormente reubicó en un local ubicado en la calle trece, local que fue convertido en un centro comercial y trajo inconformidad a los trabajadores. El objetivo del alcalde es claro, mantener las calles lo más despejadas posibles y organizar el espacio urbano como él lo desee, incluso construyendo bolardos a diestra y siniestra. Pero, ¿en dónde queda la dignidad de los vendedores de la calle? Los trabajadores también se manifestaron en contra del artículo 140 del nuevo código, que hace ilegal que ellos se ubiquen en el espacio público para laborar, y que legitima que después de haber aplicado multas, la policía pueda decomisar o destruir la mercancía. Esta medida tiene gran impacto en la economía nacional, pues puede que se erradique el trabajo informal, pero los índices de desempleo crecerán aún más.
Fotos: Juan David Lozano
